En la clase
pasada se pudo discutir varios aspectos fundamentales de las TIC y su
influencia en los diversos ámbitos de la cotidianidad, en especial, uno tan
importante como son las relaciones sociales. Como bien postulo Nicholas
Negroponte en su obra Being Digital, la tecnología ha revolucionado a la
sociedad de tal manera que las variables tiempo y espacio físico ya no son una
barrera a la hora de la comunicación social sino que ahora desde cualquier
lugar y en cualquier momento se puede establecer interacción entre personas
cercanas o incluso muy distantes si así se quisiera. Asimismo el conocimiento y
la búsqueda de la información reciben un enfoque totalmente distinto en esta
nueva era de la tecnología, hoy en día contamos con buscadores automatizados
que nos facilitan el trabajo y nos permiten acceder en ocasiones con tan solo
un ‘‘click’’ a la información deseada, no hay límites en cantidad, es por esto
que podemos percibir el internet como definen muchos autores, es decir, como
“la gran autopista de la información”.
Posteriormente
gracias al fragmento de la película “Los dioses deben estar locos” visto en
clases, se pudo observar como la tecnología impacta en la sociedad, a pesar de
que los bosquimanos eran una comunidad tan primitiva y apartada de las nuevas
tecnologías, ellos lograban adaptarse a su entorno con el uso de herramientas
creadas por ellos mismos que les facilitaban las tareas diarias y en algunos
casos permitían su supervivencia, todo esto refleja como el hombre adapta la tecnología
a sus necesidades básicas. Luego con la aparición de la botella, se ve
claramente reflejado como todo cambia pues es el hombre el que se adapta ahora
a la nueva tecnología y la implementa en su vida diaria, dejando atrás las
viejas tecnologías. Pero esto genera un problema obviamente y es que el hombre
se vuelve dependiente de esta nueva tecnología y se le olvida como puede
subsistir sin ella. Esto se ve claramente en la sociedad actual, por ejemplo,
estamos tan acostumbrados a tener siempre con nosotros el celular que ya no nos
preocupamos por aprendernos los números telefónicos pues ya están en el
teléfono y parecería absurdo, pero la verdad es que sin nuestro celular no
sabríamos cómo reaccionar y probablemente nos sentiríamos indefensos e
inseguros.
Como
conclusión, debemos ser atentos y aprovechar las ventajas que nos traen las
nuevas tecnologías, pues ellas simplifican los problemas de la cotidianidad,
pero siempre con un uso sano y no dependiente, siendo conscientes en todo
momento del impacto que está teniendo en nuestras vidas y si resulta un
beneficio o un daño para nosotros mismos.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario